Lujo y Discreción

El Hotel Plaza 18 abre sus puertas tras dos años de restauración en los que la galardonada interiorista Nicky Dobree se inspiró en el propio edificio, que data de 1896 y se asienta sobre los cimientos de una antigua casa árabe del siglo XIII. «Hemos devuelto la vida a esta Gran Señora respetando su historia y abriendo un nuevo capítulo para el viajero moderno», dijo Dobree. 

Con un espíritu sostenible y el objetivo de preservar el espíritu del edificio, la restauración se realizó con la ayuda de artesanos locales y materiales de construcción orgánicos, como morteros a base de cal, suelos de madera, piedra natural y mármol. Por ello, se levantaron las baldosas blancas y negras originales y se volvieron a colocar en suelos recién nivelados.

La montera (gran linterna de techo acristalado sobre el patio) se desmontó cuidadosamente y se reparó para devolverle su antiguo esplendor. Así como la escalera y la balaustrada de piedra, que se restauraron minuciosamente.

El huésped puede sentir el confort y la elegancia en cada detalle del hotel. Cada una de sus seis suites individuales tiene una historia que contar, ya que han sido decoradas con piezas de todo el mundo seleccionadas personalmente por la diseñadora británica.

Con un ambiente hogareño, el toque de Dobree aporta una elegancia atemporal. Los clientes se irán con la sensación de que Plaza 18 es el segundo hogar secreto que siempre han deseado.